Sentir 06: Al otro lado de las Estrellas

AL OTRO LADO DE LAS ESTRELLAS

Era medianoche.
Estaba acostada intentando soñar...
Fuera... Una suave brisa, movía la sombra de los árboles.
La penumbra daba un toque mágico a la noche.

Los sonidos del bosque me hacían permanecer despierta y mis sentidos se desbordaban.

Me concentré en escuchar la Naturaleza, el suave batir de las ramas, el caer de las hojas, la suave música de los grillos y hasta la propia brisa.

Mi respiración era tan suave, que era incluso capaz de oír los latidos de mi corazón.

Por mi ventana, entraba una luz tenue que iluminaba mi habitación.
Era la luz de las estrellas.

Mientras tanto... yo soñaba despierta, e imaginaba que viajaba por el Universo.
Daba vueltas y vueltas.

Al rato, un breve resplandor iluminó la noche.
Sabía que eran las lágrimas del cielo.
Me estaba perdiendo el espectáculo que se producía al otro lado de mi habitación.
¿Cuántas estrellas podrían haber allí?

Entonces, pensé en abrír la ventana para admirar esa lluvia de oro.

Ni corta, ni perezosa... Me levanté de la cama para asomarme.

El cielo estaba lleno de pequeños seres de luz.
Los colores se alternaban y las lágrimas caían.

Miraba las estrellas con melancolía.
¿Nos buscará alguien desde la otra orilla del cielo?

No se porqué, pero presentía que alguien me observaba.

Mi vista buscaba e intentaba concentrarse en un punto, pero aparecían más y más estrellas.
Era imposible contarlas y mi mirada se perdía en las profundidades.

Miré hacia el suelo, e increíblemente seguía viendo lágrimas doradas.
Eran las luciérnagas...
Las hadas del bosque.

Siendo, como era de noche... La luz dorada dominaba el paisaje.
Estrellas, lágrimas y hadas.

De repente... y desde el cielo... Otra lágrima cayó.
Ésta, empezó a serpentear como si tuviese vida propia.
Su luz se iba tornando azul como el mar.

Lo extraño, es que mientras se acercaba, se iba vislumbrando una silueta.

No entendía lo que estaba pasando.
Sentía una paz inmensa, amor y ternura.

Un ser de luz apareció delante de mí.
Yo... Intentaba no asustarme.
¿Sería una hada del cielo?

Luego, me ofreció su mano.
Pero al acercarle la mía, algo raro sucedió.
¿Que era lo que le sucedía a mis manos...?

Me asusté y giré la cabeza para ver mi reflejo en el cristal.
No daba crédito a mis ojos...
¡¡Yo era también un ser de luz!!

Para colmo... me veía a mi misma durmiendo en la cama.
¿Que me estaba pasando...?

Al cogerle de la mano, una suave vibración recorrió todo mi cuerpo.
Era amor puro.
Nuestra luz manaba sin parar y nos unimos en un abrazo cósmico.
Ahora éramos una sola luz, que vibraba en un frenesí de sensaciones.

Sentía todo el Universo y un amor infinito.
Sentia todas las estrellas.
Entonces, me dí cuenta de que ese ser era mi eterna alma gemela.

Yo sin saberlo la busqué entre las estrellas y entonces vino a verme.
Mi alma le echaba de menos.

Cuando nos separamos.
Me di cuenta de que un lazo rojo unía nuestras almas.
Estábamos conectados... entrelazados.

Pero en ese mismo momento, siento el sonido de mi despertador.
¡¡Ring... Ring... Ring...!!

Ahora estoy en la cama...
Al abrir los ojos, me doy cuenta de que todo había sido un precioso sueño que no quería olvidar.

Que lástima que no fuese real.
¡¡Quiero ver a mi alma gemela otra vez!!

¡¡Pero sorpresa!!
Luego... mientras me vestía... me di cuenta de que tenía todavía ese lazo rojo.
Al volver a tocarlo, vibraba.
Mi alma gemela seguía al otro lado...
Al otro lado de las estrellas.

Mi alma gemela existe y me espera cada noche.
No era un sueño, o sí....
¿Son los sueños reales?

Espero que os haya gustado mi relato.

FIN-THE END

Capítulos de la serie de "Mis Sentimientos". (Pinchar)

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